Praena y Martínez, parten del hecho de que vivimos inmersos en un mundo donde la tecnología y las TIC forman parte de nuestro día a día, y cada vez más. Ante esta realidad, no queda otra que desde el ámbito educativo “subirse al carro” y remar en la misma dirección y no a contracorriente del mundo en que vivimos, es por ello, por lo que los autores de este artículo apuestan por la integración de las TIC en el aula desde los primeros niveles educativos, sustentando su opinión en argumentos que exponen como los siguientes:
- Las Tic como apoyo educativo para el docente.
- Las Tic como mejora del modelo educativo para paliar la transmisión unidireccional de conocimientos y como fomento del trabajo colaborativo.
- Las Tic como fuente de información más accesible y atractiva.
- Las Tic como medio de expresión creativo para los alumnos/as.
- Las Tic como facilitador y creador de espacios de aprendizaje tanto presenciales como virtuales.
- Las Tic como fuente de motivación para seguir aprendiendo.
- Introducir al alumnado en el uso de herramientas tecnológicas que en un futuro deberán utilizar y saber manejar de forma competente.
Se puede trabajar con alumnos de 4-5 años tanto en gran grupo o en pequeños grupos e incluso de forma individual, tanto bajo las directrices del docente como de forma autónoma. Mediante el uso de ordenadores, además de la mejora en el manejo de estos, estas criaturas podrán desarrollar su autonomía (tanto en la toma de decisiones como en su aprendizaje debido a la posibilidad de autocorrección), su psicomotricidad fina, trabajar el lenguaje iconográfico y visual tan importante para el desarrollo de la lectoescritura y potenciar la interacción social y el trabajo colectivo.
Este artículo fue escrito en el 2009, ahora 11 años más tarde, todavía los dispositivos digitales y las TIC están más presenten en todos los ámbitos de nuestra vida. Por aquel entonces, los autores ya eran conscientes de que tendría lugar un enorme avance en cuanto a tecnología y que esta debería ir “depurándose” y convirtiéndose en más asequible y fácil de manejar. No obstante, este proceso de evolución y de mejora no cesa nunca, es por ello, por lo que es imprescindible la continua formación del profesorado y mantenerse actualizado. Parece que siempre la escuela va “algunos pasos por detrás”. Pero cierto es, que actualizar los dispositivos digitales del centro en periodos de tiempo relativamente cortos supone un costo económico que no todos los colegios pueden acarrear. En ese caso, debemos poder y saber aprovechar todos los recursos de los que dispongamos, estar activos, utilizar y compartir recursos libres que se nos ofrezcan.
